Mazda MX-5 1.8 126cv RC

Hace ya unos cuantos años probamos el Roadster por excelencia, el Mazda MX-5. En aquella ocasión, la unidad probada venia dotada del motor más potente de la gama. Un 2 litros que produce una potencia de 160cv. Que en conjunto con un cambio automático, nos permitió disfrutar del Mazda durante unos días.
El 2.0 de 160cv se sigue vendiendo en la actualidad. Con la misma potencia y el mismo cambio automático. Es una buena opción si transitamos mucho por ciudad. Donde el cambio automático es sin duda una de las mejores opciones. Probando el MX-5 con el 2.0 notamos como el motor respondía muy correctamente a bajas vueltas. Pero para sacarle todo el jugo era obligado estirar las marchas hasta el corte de inyección. Por encima de las 7000 revoluciones. El cambio automático no era demasiado deportivo y era más una merma importante a la hora de realizar aceleraciones. El vehículo objeto de esta prueba es el Mazda MX-5 con el motor de acceso a la gama. El 1.8 que eroga 126cv. Pueden parecer pocos para un vehículo de este tipo. Naturalmente con más potencia el este pequeño Roadster iría mejor, pero no por ello va mal con los 126cv. Si bien es cierto que en aceleraciones o recuperaciones se echa en falta más potencia bajo el capó. Este 1.8 empuja muy bien desde bajas vueltas, subiendo con un bonito sonido hasta más de las 7000 revoluciones. Teniendo la línea roja del tacómetro en las 6500 revoluciones.
Externamente e interiormente el Mazda MX-5 no presenta cambios con el MX-5 aquí anteriormente probado. Sigue siendo un vehículo divertido de conducir. Y muy deportivo si así lo deseamos. Yendo descapotado el sonido del motor puede llegar a ser molesto. Pero con la capota también se deja notar bastante. Sobre todo al sobre pasar los 120 km/h. Donde dentro del vehículo tendremos que alzar un poco la voz para hablar con el acompañante.

Visibilidad
En este tipo de vehículo la visibilidad percibida por el conductor siempre pasa a un segundo plano, ahora bien, en el Mazda MX-5 podemos decir que goza de una excelente visibilidad, tanto capotado como descapotado. Con la capota rígida puesta el conductor no tendrá problemas con el pilar A o la visión trasera, ésta es directa, sin nada que estorbe. Sin capota, aun mejor, nada que moleste para una correcta visión por parte del conductor. La unidad probada disponía de faros halógenos, su funcionamiento era correcto. Nada que destacar.

Impresiones de Conducción
El actual Mazda MX-5 se comercializa con dos motores gasolina, un 2.0 que eroga 160cv, y el aquí probado, un 1.8 litros con 126cv. El 1.8 litros mueve con suficiente soltura el MX-5, además de ser un motor progresivo y lineal que despunta en la parte alta del tacómetro, es parco en consumos y nos embauca con un sonido delicioso a altas vueltas, que sin duda nos incitara a volver a escucharlo. Con 126cv más de uno pensara que es un vehículo muy bonito y de paseo, que no es capaz de rivalizar con vehículos como un Peugeot RCZ, Volkswagen Golf Cabrio, etc… Y es que no necesita rivalizar con nadie, el MX-5 juega en otra liga muy diferente, es un vehículo prestacional y a la vez un magnifico juguete con el que disfrutar descapotado del sonido de su motor y la brisa del aire en la cara. Que por cierto, se descapota en tan solo 12 segundos, de los más rápidos en su categoría.

Frenada
El equipo de frenos montado en el MX-5 1.8 de 126cv no nos dejara indiferentes, sin duda. En una conducción normal y cotidiana los frenos se muestran fuertes, resistentes, con un buen mordiente en el primer tramo del pedal, que va desapareciendo para dejarnos pegados contra el cinturón. En una conducción más enérgica los frenos siguen siendo un punto fuerte en el que sabemos que nos podemos apoyar, soportan frenadas intensas sin perder eficacia. El equipo se compone de discos en ambos ejes, delante ventilados y detrás macizos. ABS de última generación, poco intrusivo y ayuda a la frenada de emergencia.

Tracción
Como es natural en un vehículo de este tipo la tracción es trasera, las diferencias con un tracción delantera son notables desde el primer momento y en el Mazda MX-5 se nota, más de una vez en pavimentos húmedos y con un pequeño exceso de acelerador el control de tracción tendrá que hacer horas extra. Tiene tendencia sobreviradora que puede llegar a ser divertido en una conducción rápida. En una conducción normal apenas tendremos este problema.

Estabilidad
Uno de los aspectos que más nos asombro fue la alta estabilidad de la que dispone el MX-5, parece soldado a la carretera y eso que la suspensión ni es seca ni incomoda, todo lo contrario, en algún momento da sensación de ser más bien blanda. En ciudad el comportamiento en resaltos y badenes es exquisito, no se nota apenas un golpe seco, la suspensión se traga el reductor de velocidad sin molestar a sus ocupantes. Sin duda es un vehículo muy estable que permite una conducción rápida y una alta seguridad, ahora bien, si nos confiamos y excedemos los límites del vehículo sale a relucir su tendencia sobreviradora que nos puede dar más de un susto, por eso siempre recomendamos llevar todos los sistemas de ayuda a la conducción activados, el control de estabilidad ESP puede salvarnos de un golpe tonto si nos confiamos demasiado. Y en este tipo de vehículo suele pasar, tienen un límite tan alto que una vez pasada esa barrera, todo pasa muy rápido y de manera brusca.

Reposacabezas
El Mazda MX-5 siendo biplaza dispone de solo dos asientos, estos tienen el reposacabezas incluido en el propio asiento, por lo tanto no tiene ningún tipo de manipulación/reglaje.

Cinturones
Las dos plazas útiles disponen de cinturones de tres puntos de anclaje, ambos con pretensores pirotécnicos y avisador acústico de cinturón no abrochado al emprender la marcha.

Bebes y Niños
Claramente el MX-5 no es el más indicado para un uso familiar, ya que su pequeño tamaño y espacio de maletero lo convierten en un segundo vehículo, para los fines de semana, para disfrutar.

Airbags
En las sucesivas actualizaciones con el paso de los años en el MX-5 han ido manteniéndolo tecnológicamente y en temas de seguridad al día. Dispone de Airbag de conductor, acompañante y laterales.

Euroncap
No hay datos del último MX-5

Recuperaciones
El bajo peso en vacío y una potencia respetable consiguen que el Mazda MX-5 1.8 sea bueno en recuperaciones y aceleraciones. El 0 a 100 Km. /h lo realiza en 9,9 segundos. La velocidad máxima según ficha es de 198 Km. /h.

Caja de Cambios
El Mazda MX-5 podemos obtenerlo con cambio manual o cambio automático, este primero es el que venía con la unidad de pruebas. Es un cambio manual de 5 relaciones, rápido entre cambios y de fácil uso, la palanca es muy cómoda al uso. Las marchas entran con suma facilidad, se nota un cambio muy mecánico, que en conducción decidida es una maravilla. Sobre todo el corto recorrido de la palanca.

Circulando por Carretera
Como es ya costumbre en este tipo de vehículos donde más se disfrutan es en carreteras secundarias, donde dentro de unos límites podemos darle algo más de “zapatilla” para saber bien que tenemos entre manos. Y el MX-5 nos gustó mucho, decir que nos costó tener que devolverlo, de entre todos los vehículos que he tenido el placer de probar (+ de 400), este es uno que siempre estará en mi memoria y corazón. No se conduce, se pilota y eso solo pueden entenderlo los poseedores de un MX-5. En este tipo de vías el Mazda consume relativamente poco sabiendo que el 1.8 litros de Mazda no es especialmente tragón. Nuestro consumo a lo largo de toda la prueba fue de unos 7,9 litros en mixto.

Circulando por Autopista
El mismo día de recoger el Mazda en las instalaciones del polígono ciudad del motor, para poder probar como de “claustrofóbico” es el interior del MX-5, tope con un pequeño atasco por accidente en la M50 (Curiosamente con el primer MX-5 me pasó algo igual en la A1). Tuve tiempo de observar con detalle todas las funciones del MX-5 y en ningún momento note poco espacio en el interior, mido 1.81cm y me encontraba la mar de a gusto dentro de él. Ya cerca de mi destino decidí descapotarlo con una breve parada y 12 segundos de descapotamiento, pude observar como el aire entra con fuerza en el Mazda, siendo este molesto a velocidades de crucero, unos 120 Km. /h, el deriva brisas o corta vientos es demasiado pequeño como para hacer bien su función dejando que el aire campe a sus anchas por el interior del habitáculo. Si eres una persona alta el aire te dará sin miramientos directamente en la cara. Después de este breve análisis opte por llevar el Mazda capotado por autopista/autovía y descapotarlo en ciudad y carreteras nacionales donde con el limite a 90 Km. /h el aire no es en absoluto molesto. El consumo es contenido si realizamos un conducción relajada, si solicitamos a menudo la máxima aceleración del motor veremos bajar la aguja del combustible con gran rapidez.

Circulando por Ciudad
En ciudad el comportamiento del MX-5 es intachable, fácil de conducir. Dado su pequeño tamaño y que es un vehículo bajo en más de una ocasión no nos respetaran como se debe, parece ser que si no vamos con un monstruo de más de 2 toneladas y tracción total no tenemos derechos. La suspensión goza de un comportamiento imponente en ciudad, y viene de perlas ahora que están todas plagadas de reductores de velocidad, sobre todo los de color negro y amarillo que son un crimen para los amortiguadores, mermando su eficacia en pocos kilómetros. El consumo en un uso solo de ciudad si es alto, podemos ver medias de 10/11 litros con facilidad.

Calidad de Acabados
En el Mazda MX-5 no priman los buenos acabados, son correctos, se abusa de plásticos duros en el salpicadero.

Calidad de Materiales
Los materiales utilizados son de correcta calidad, los ajustes son buenos y no se observo nada fuera de lo normal.

Conclusiones
En conclusión, el Mazda MX-5 es un mito dentro de los Roadster, tantos años vendiéndose y siendo el más vendido es una carta de presentación innegable. Además de ser de los roadster más económico en la compra. Y que dispone de todos los avances tecnológicos que hoy día se comercializan. Está claro que no es comparable con los acabados de por ejemplo un Audi TT Roadster, pero es que este vale bastante más, juegan en el mismo campo pero son de mundos diferentes. En el Mazda MX-5 todo es más personal, todo se siente más, como el “cuore” de Alfa Romeo.

A favor: estabilidad, motor, precio.
A mejorar: consumos, tirador de apertura tapa combustible.

Redactor y probador: Daniel Galdeano Martínez
Fotos: Daniel Galdeano Martínez / Pablo Nez