La Federación Internacional de Automovilismo ya recibió el visto bueno de la Comisión Mundial del Motor para poder implementar los cambios necesarios en el actual reglamento técnico para poner solución al rebote excesivo que tienen los actuales monoplazas que han impedido a muchos equipos ser competitivos y que incluso ha afectado en alguna ocasión a la salud de los pilotos. Alpine F1 muestra preocupación ante estas medidas.

Estos cambios están centrados en regular la rigidez del fondo plano de los monoplazas con el objetivo de terminar con el llamado ‘porpoising’, un efecto que equipos como Mercedes han sufrido enormemente esta temporada. Equipos que no lo han sufrido como Alpine F1 ya temen estas medidas implantadas por la FIA para 2023, ya que creen que pueden beneficiar a los grandes equipos a partir de la próxima temporada, tal y como indica el director técnico de la escuadra francesa, Pat Fry.

“Desde el punto de vista aerodinámico, tenemos un departamento más pequeño que los tres equipos que están delante de nosotros y también que nuestro máximo rival, McLaren. Ellos quizá puedan colocar a 20 personas en otros proyectos, pero también pueden recuperarlas fácilmente para solucionar dichos problemas y devolverlas de nuevo a su puesto actual. Cuando tienes un nivel extra de capacidad de trabajo, cuentas con una gran ventaja. El retraso en la aplicación de la normativa ha sido bueno para ellos, ya que saben que los equipos más pequeños no les van a poder copiar. Esta nueva normativa técnica va a ser un reto mayor para nosotros”, comenta Pat Fry en declaraciones para Motorsport.

“Cuanto más pronto se hubiesen hecho las modificaciones, mejor hubiese sido para nosotros, ya que en caso de cambiar, se vendría abajo lo que estamos haciendo ya. Estoy seguro de que todos están aprovechando horas del túnel de viento para el concepto de 2023, nosotros lo estamos haciendo, pero quizá ese trabajo quede en nada por un cambio de normativa”, añade.

Vía – thebestf1.es