Probamos esta semana el buque insignia en cuanto a SUV se refiere de la marca Hyundai. La versión que ha pasado por nuestras manos es la Santa Fe PHEV, es decir, híbrida enchufable. Dotada de un motor térmico de 1,6 litros de cilindrada turbo y un sistema híbrido que permite aumentar su potencia hasta los nada desdeñables 265cv.

El Hyundai Santa Fe es un vehículo tremendamente funcional que, a lo largo de los días que lo hemos estado probando, se iba ratificando dicho pensamiento, no solo por su pluralidad híbrida que le permite mayores beneficios que un vehículo clásico de combustión interna.

Al tratarse de un SUV híbrido enchufable goza de la más que interesante pegatina o distintivo medio ambiental de la DGT de cero emisiones que le permite rodar por cualquier punto en ciudades como Barcelona o Madrid.

Por lo general la autonomía en modo completamente eléctrico de este tipo de vehículos es algo escasa, en el caso del Santa Fe, donde usamos casi la mayor parte de los kilómetros que se le realizaron el modo EV, no sorprendió como, poco a poco, al paso de los kilómetros esta iba aumentando conforme se usaba.

El máximo kilometraje que conseguimos en EV fue cercano a los 45km realizados, decir que perfectamente es válido para un uso diario, para desplazarse al trabajo o las gestiones diarias.

El tiempo de carga es muy variable ya que si se hace en un enchufe tipo estándar como los Schuko de nuestra casa, solo podremos cargar a 10 Amperios, lo que equivale a 2300w hora. Con esa potencia la carga se puede alargar si la batería está completamente descargada hasta las 8 horas.

Con otros métodos de carga más potentes que el Santa Fe PHEV puede recargar su batería de 13,8 kw/h a mayor velocidad.

Hace unos años, cuando probé por primera vez un sistema híbrido parecido al de este Hyundai, todos sabíamos que sería el futuro/presente, pero lo veíamos como una opción más, no como una alternativa a los sistemas tradicionales de motores diésel o solo gasolina.

Hoy día cada vez se venden y se ven más híbridos de las diferentes marcas existentes. Todos con el mismo principio, un sistema híbrido basado en un motor gasolina atmosférico o turbo alimentado. Apoyado por uno o dos motores eléctrico que, dependiendo de la marca, puede ser más o menos potente, al igual que la capacidad de las baterías.

Este tipo de coches sigue siendo perfectamente una opción de ante sale si no es necesario la compra de un eléctrico puro, ya sea por precio, o por el mero hecho de que no es necesario. Un PHEV brinda las mismas ayudas y facilidades que un eléctrico a la hora de usarlo en ciudades con limitaciones de acceso a zonas de bajas emisiones.

También, por su puesto, se beneficia de las ayudas en estacionamiento en las grandes ciudades, como por ejemplo Madrid no teniendo que pagar por aparcar en zonas verdes y azules, también poder hacer uso del BUS-VAO a pesar de ir solo un ocupante en el coche. Diferentes ayudas también a la hora de adquirir el vehículo.

Además de poder entrar la zona “Madrid 360”, damos fe de ello, pasando hace unos días por la Gran Vía. Los vehículos ECO y Cero emisiones pueden transitar libremente por esta zona restringida a los vehículos sin distintivo medioambiental o que sean B o C.

Pudimos estacionar el tiempo que precisamos en una zona ZBE muy céntrica sin temor a sanciones.

VISIBILIDAD

El Santa Fe PHEV tiene una longitud de 4.785 mm, su anchura es de 1.900 mm. Y de altura 1.710 mm. Dentro del segmento de los SUV de tamaño grande sus medidas son correctas.

Interiormente el Santa Fe dispone de un buen espacio para sus ocupantes. El acceso a las plazas traseras es correcto. Es lo bueno de ser un 5 puertas. Desde el puesto del conductor la visibilidad no tiene ninguna pega.

Los pilares A son de un buen grosor pero nos restan visibilidad en alguna ocasión puntual. Nuestra unidad en concreto disponía de faros led, poco o nada tienen que ver con unos faros halógenos tradicionales, que si bien cumplirán, siempre se quedan algo justos en capacidad y potencia lumínica. Con los de ledes dicho problema ya queda en el olvido.

IMPRESIONES DE CONDUCCIÓN

El Santa Fe PHEV monta un sistema híbrido potente. El 1.6 T-GDI + el motor eléctrico consiguen una potencia de 265cv en conjunto, con unas buenas prestaciones. 8,8 segundos en el 0 a 100 km/h. Y una velocidad máxima de 187 km/h.

Dispone de 6 modos de uso, Eco, smart y Sport, para carretera. En modo Eco, se intenta en todo momento minimizar el gasto de carburante y hacer un mayor uso de las baterías que mueven el motor eléctrico. Obteniendo una media de consumo muy baja. Las prestaciones en este modo son correctas, no se le puede pedir más.

El modo Sport, en este modo el coche cambia radicalmente. La capacidad de aceleración aumenta notablemente, y por ende sus consumos también. Pero nada desmesurado. Es en el modo Sport donde podemos sacar el máximo jugo al conjunto de las mecánicas a nivel prestacional.

En tierra dispone de otros tres modos: Sand, Mud y Snow. Todos ellos adaptados para terrenos difíciles de baja adherencia y tracción.

FRENADA

El Santa Fe PHEV monta discos en ambos ejes. Delante discos ventilados y detrás discos macizos.

El sistema de regeneración de energía que utiliza está alojado en el eje delantero, cada vez que frenamos con nuestro vehículo se pierde energía por la acción del rozamiento y fricción de las pastillas con los discos. Esa energía es aprovechada en el Santa Fe PHEV para la carga de sus baterías sin tener que depender del motor de gasolina más de lo debido. También el propio motor eléctrico es capaz de recargar las baterías en frenadas donde ni siquiera actúan los frenos convencionales. Con soltar el acelerador muchas veces ya retiene lo suficiente.

En la práctica es imposible a base de frenadas cargar las baterías a tope. Pero si es una ayuda para mantener la carga mayor tiempo. En el caso del Hyundai se lograba una buena recarga en el día a día.

El tacto de los frenos es bueno, pero debemos hacernos a él, ya que en alguna frenada podemos tener un pequeño susto. Frena bien, por supuesto, el problema reside en el tacto de los frenos y el sistema de regeneración que parece que no le permite frenar como uno quiere. Suele pasar una vez nos estamos deteniendo que debemos efectuar mayor fuerza en el pedal para parar por completo. Como decía, solo requiere hacerse a él. Una vez se recorren los primero kilómetros ni nos acordaremos. Dispone de ABS de última generación.

TRACCIÓN

La tracción del Santa Fe PHEV va asociad a ambos ejes, es decir, es tracción total.

Dicho esto pasamos a comentar que el Santa Fe PHEV no presenta perdidas de tracción de ningún tipo en arrancadas. A la hora de arrancar con él aun pisando a fondo su respuesta es tranquila por lo tanto no presenta un problema de pérdidas de tracción. Donde sí podemos tener pérdidas de adherencia es en curvas pero esto es ya más cosa de los neumáticos que del propio vehículo en sí, los neumáticos montados en la unidad probada son de buena calidad y con un agarre más bien alto tanto en seco como en mojado. Pero también son compatibles con un uso más mixto, como el de tierra por caminos de no alta complejidad. Dispone de control de tracción de serie.

ESTABILIDAD

Es casi obligatorio pensar que un coche de este tipo debe disponer de una estabilidad correcta, nada que destacar en este aspecto. En el caso del Santa Fe PHEV podemos asegurar que su estabilidad y bastidor está muy por encima de su mecánica. Suspensión confortable y a la vez capaz de lidiar con las oscilaciones de la carrocería, es un vehículo concebido para un uso plural, todo es confortable en él, ideal para viajes largos. Apenas se nota cansancio después de varias horas de conducción. Mención especial a los asientos delanteros, por su alto confort y calidad.

En definitiva, muy seguro. Cuenta con control de estabilidad de serie, muy intrusivo en zonas reviradas.

REPOSACABEZAS

Homologa cinco plazas útiles, todas ellas incorporan reposacabezas. Los delanteros son regulables en altura e inclinación. Los traseros a su vez son solo regulables en altura.

CINTURONES

Viene provisto de cinco cinturones de tipo estándar de tres puntos de anclaje uno para cada plaza. Los delanteros incorporan pretensores pirotécnicos. Todos ellos disponen de avisador acústico de cinturón no abrochado.

BEBES Y NIÑOS

El espacio interior del Santa Fe es generoso, cuenta con un más que correcto maletero (782L) donde podremos llevar todos los bártulos de los niños. Las plazas traseras disponen de un correcto acceso, al ser 5 puertas no tendremos problemas a la hora de introducir la sillita de bebe y anclarla en los anclajes ISOFIX con Top Theter que trae en los asientos traseros.

La unidad probada dispone de dos plazas más, es decir, 7 plazas en total. Quedando un espacio resultante para el maletero de 571 litros.

AIRBAGS

El Santa Fe cuenta con un buen surtido de airbag, de conductor, acompañante (desconectable), laterales, de cortina…

RECUPERACIONES

No podemos decir que el Santa Fe PHEV en recuperaciones sea un portento, porque directamente no está hecho para ser el más rápido en aceleración o recuperación. Para eso está otro tipo de vehículos. Este Hyundai aun así cuenta con unas recuperaciones muy correctas. Realiza el 0 a 100 en 8,8 segundos, una cifra muy buena si tenemos en cuenta su peso, 2.005kg . La velocidad máxima según ficha técnica es de 187 Km. /h.

El cambio automático del Santa Fe PHEV es de convertidor de par con 6 relaciones, parecido al utilizado en muchos otros coches, le beneficia en unas mejores recuperaciones que si tratara de un variador al uso clásico.

CAJA DE CAMBIOS

El Santa Fe PHEV sólo está disponible con cambio automático de convertidor de par. Un cambio tradicional automático, suave y de fácil uso.

Este cambio cuenta con varios modos de uso, el D y levas en el volante. Ambos son válidos para emprender la marcha, el más utilizado es el D (Directa), el Secuencial se utiliza para, por ejemplo, reducir marcha al bajar puertos muy pronunciados ya que dota al vehículo de una mayor retención por parte del motor térmico.

CIRCULANDO POR CARRETERA

En carretera el Santa Fe PHEV se comporta de manera noble y de fácil manejo, es fácil de conducir y da buena seguridad a su conductor. Contamos con potencia de sobra para enfrentar un adelantamiento rápido, sobre todo en modo Sport donde los motores empujan al máximo al unísono.

Gracias al ordenador situado en el medio de la consola del salpicadero podemos ojear en marcha los consumos instantáneos, la media y sobretodo el funcionamiento del motor eléctrico, de combustión interna y la carga de las baterías. Nos daremos cuenta que si por ejemplo estamos llaneando a 90 Km. /h podemos ir solo con el apoyo de la batería ya que en ese momento no se precisa de más.

A la hora de requerir mayor potencia entra en funcionamiento el motor de gasolina, su puesta en marcha es rápida y casi imperceptible, sólo se deja notar un pequeño temblor, que notaremos a velocidades bajas si pisamos a fondo, por lo general apenas es notable cuando se pone en marcha.

Por lo demás cuenta con buena estabilidad en carretera, y unos consumos de risa, el homologado WLTP se sitúa en 1,6 litros para todo tipo de vías. Si bien este consumo es algo anecdótico porque requiere siempre tener la batería recargada y, cuando no es posible, el consumo se resiente al hacer un mayor uso del motor térmico. Donde los consumos, no son malos, rondando los 6, 7 u 8 litros dependiendo de la batería disponible, no son los homologados por la marca.

CIRCULANDO POR AUTOPISTA

En la autopista/autovía nos deja notar varias cosas, una suspensión muy confortable para este tipo de vía, ideal para firmes en mal estado.

El eje trasero tiende a flanear más que el delantero, apenas es perceptible pero si el vehículo va cargado si se notara. Sobre todo si se hace uso de la máxima capacidad de pasajeros, las 7 plazas.

En carreteras con buen asfalto es como ir sentados en el sofá de nuestra casa no notaremos nada. También se deja notar la rumorosidad del motor de gasolina si se le exige a 120km/h, la insonorización es buena pero es inevitable oírlo si se demanda potencia.

En autopista dependiendo de la pendiente de la vía y del uso que hagamos del acelerador podemos ir un buen trayecto solo con la ayuda del motor eléctrico, con los 91cv que dispone es muy capaz.

CIRCULANDO POR CIUDAD

En ciudad el uso del motor eléctrico es mayor aun si no superamos los 50 Km. El Hyundai Santa Fe, tiende, en todo momento, a realizar mayor uso del modo eléctrico que el de combustión, priorizando así las emisiones y los consumos. Nos ha gustado la eficiente gestión que hace de la autonomía eléctrica en todo momento. Es difícil que la batería se quede a cero en cualquier situación, permitiendo de este modo un mayor uso del sistema híbrido.

A pesar de su buen tamaño, superior a los 4,7 metros de longitud, es un vehículo con un amplio radio de giro, damos fe de que pudo transitar por las estrechas calles de las zonas más céntricas de Madrid sin mayor problema.

LA OPINIÓN DEL PROBADOR

Hace ahora más de 15 años que probé mi primer híbrido, que era la segunda versión del Toyota Prius que disponía de un motor de gasolina 1.5 gasolina atmosférico de 78cv asociado a un eléctrico. En total una potencia de unos 99/100cv.

Como comente en su momento, puede parecernos una potencia justa hoy día, pero un vehículo híbrido no está concebido para “irse de tramo” con él, su filosofía es más bien completamente opuesta. Se busca el mínimo consumo y el mayor agrado de uso. En esto los vehículos híbridos en general son tan fáciles de usar que agradan a todo el mundo que los conduce.

Esa facilidad y el menor consumo consiguen que la gente que prueba uno repita con el tiempo, lógico por otra parte.

A nosotros nos ha pasado algo parecido, bajarse de un vehículo con un motor diésel, ruidoso, que vibra y no es especialmente refinado y subirse en uno híbrido es como la noche y el día. Por no hablar de los eléctricos puros.

Por eso pensamos que los híbridos, y más los enchufables, aún tienen mucho que decir en este inevitable cambio en el panorama del motor en el mundo.

CALIDAD DE ACABADOS

El buque insignia SUV de la marca Hyundai dispone de unos acabados muy por encima de más de un coche de la competencia.

CALIDAD DE MATERIALES

Los materiales utilizados en la confección del Santa Fe PHEV son de buena calidad, sobre todo las piezas más visibles, como la piel de los asientos, asientos, salpicadero…

CONCLUSIONES

En resumen, el Santa Fe PHEV es el SUV híbrido de la marca Hyundai. La cual lleva varios años comercializando este tipo de vehículos. Este Santa Fe PHEV nos ha parecido muy equilibrado en todos los sentidos, desde prestaciones a acabados.

Una vez que lo pruebas y ves lo bien que funciona y todo lo que ofrece es entendible la buena acogida que tiene, incluso en conducción off road es mejor de lo que cabría esperar, el funcionamiento de la tracción total y la posibilidad de poder gobernar, con diferentes modos de uso, su funcionamiento, no lo tienen todos los SUV.

 

A FAVOR:

 

Sistema híbrido, facilidad de carga, calidad de rodadura.

 

A MEJORAR:

Tamaño deposito gasolina, precio.

 

 

 

DATOS TÉCNICOS

Versión: 1.6 T-GDI + eléctrico: 265cv Puertas: 5
Cilindros: 4 en línea Plazas: 7 (2 + 3 +2)
Par máximo: Térmico: 265 Nm a 1500 rpm

Eléctrico: 304Nm, 91cv – 66,9kw

Maletero: 782 litros
Distribución: 4 válvulas por cilindro. Dos árboles de levas en la culata Peso: 2.005Kgs.
Alimentación: Turbo. Gasolina- inyección directa Depósito: 47 litros
Tracción: Total Velocidad: 187 km/h
Cambio: Automática, convertidor de par

CONSUMOS

Consumo medio WLTP 1,6 (l/100 km)
Emisiones de CO2 37 (gr/km)
Normativa de emisiones Euro 6
  Autonomía eléctrico 58 km/s  

 

DIMENSIONES

Largo / ancho / alto (mm)                                        4785 / 1900 / 1710

 

 

0 a 100 km/h: 8,8 segundos

Precio de unidad probada sin extras y con descuentos: desde 59.870 €

 

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