En el Gran Premio de Estados Unidos fuimos testigos de una nueva debacle de Ferrari. En un primer momento, todo apuntaba a que Vettel podría luchar por la victoria. En la sesión de clasificación del sábado, se quedó a tan solo 0,012 segundos del tiempo mas rápido marcado por Valtteri Bottas. No obstante, de la noche a la mañana, todo cambió.
Tras ponerse el semáforo en verde, el piloto alemán sufría subviraje en su monoplaza, lo que provocaba una falta de ritmo evidente, haciendo imposible cumplir la tarea de mantener a raya a sus rivales. Por su parte, Charles Leclerc no encontró el ritmo en ningún momento. Estuvo toda la carrera en tierra de nadie, más rápido que el coche que tenía detrás y, más lento que el grupo de cabeza.
“No tengo ninguna explicación. El coche era difícil de conducir. Ahora, necesitamos analizar y comprender qué era lo que no funcionaba correctamente”, expone Charles Leclerc.
“Todavía no hemos entendido cómo ha sido posible que hayamos sufrido tal pérdida de ritmo entre el sábado y el domingo. Es tan simple como eso”, declara el jefe del equipo Ferrari, Mattia Binotto.
Sebastian Vettel, que se vio obligado a abandonar en los primeros compases de la carreras después de que la suspensión de su monoplaza se rompiera, incide en que esto ha sido un hecho aislado. Por ello, espera poder dejarlo atrás y centrarse en las dos carreras que quedan para terminar el año. El objetivo para el alemán es poder ganar en al menos uno de los dos Grandes Premios que quedan para finalizar la actual campaña.
“Creo que estaba claro que algo no funcionaba. Espero que este problema no se repita en las últimas dos carreras. La mentalidad es clara. Queremos ganar y vamos a trabajar duro para ello”, finaliza el piloto de 32 años de edad.
Vía – thebestf1.es