El sueco está ileso; Sauber investiga si hubo un problema con el DRS
Marcus Ericsson ha salido por su propio pie de su coche tras sufrir un fortísimo accidente en los primeros minutos de los Libres 2 de Italia. El sueco iba camino a la primera chicane del circuito de Monza y en la frenada, se le desestabilizó el monoplaza con el DRS abierto, de tal forma que impactó contra las barreras y llegó a dar hasta tres vueltas de campana.
Marcus Ericsson ha sido el protagonista negativo del inicio de la segunda sesión de entrenamientos libres del GP de Italia. Sólo pasaban unos minutos desde que se pusiera el semáforo en verde, cuando el coche del sueco se desestabilizó y se fue hacia las protecciones en la frenada de la primera chicane y dio tres vueltas de campana antes de pararse en seco. El C37 tenía el DRS abierto en el momento del accidente. Al mismo, que quedó totalmente destrozado, se le rompió la suspensión delantera.
El piloto de Sauber mantuvo a los espectadores en vilo sobre su estado durante unos segundos, ya que no se movía. El mensaje tranquilizador vino pocos instantes después, cuando la FOM retransmitió un mensaje por radio en el que se le escuchaba hablar.
“No sé qué ha pasado, estoy bien“, comentó el sueco tras el accidente.
La rápida reacción de los comisarios ayudó en un traslado efectivo y veloz de Ericsson al centro médico del circuito. A su llegada, se le veía algo aturdido, algo normal tras un golpe tan violento. No obstante, desde Sauber han confirmado que está bien. Mañana deberá pasar un examen médico para recibir la luz verde para participar en la tercera sesión de entrenamientos.
Los de Hinwil se han puesto a trabajar en el coche de Charles Leclerc nada más saber del impacto de Ericsson y han hecho las comprobaciones pertinentes para asegurarse que el DRS del coche del monegasco funcionaba correctamente.
[Fuente: soymotor.com]