• El Ibiza Kit Car volvió a los tramos 25 años después para celebrar los tres títulos de SEAT en la Copa FIA 2 Litros del Mundial de Rallyes.
  • El RallyRACC Catalunya-COSTA DAURADA, en su tramo espectáculo, fue el escenario donde volvieron a brillar ante el público los dos SEAT Ibiza Kit Car de la Colección de SEAT Históricos.
  • El E1 fue pilotado por Bardolet-Muntada y el E2 por Rius-Pallarés, ¡los mismos que condujeron estos coches hace 25 años!

Orgullo y satisfacción es lo que sintió la gran familia de SEAT al ver salir sus dos Ibiza Kit Car Campeones del Mundo de Rallyes de la Colección de SEAT Históricos rumbo a los virados tramos del RallyRACC Catalunya. Los mismos tramos en los que se batieron frente a lo más granado del panorama mundial hace ahora 25 años, los mismos a los que se impusieron.

Orgullo para los mecánicos que los cuidan, miman y mantienen en esa mágica Nave A-122 donde reposa la colección del fabricante español, y no solo ya por el magnífico desempeño de los dos coches en los tramos, también por escuchar las ovaciones, los aplausos y el baño de multitudes del que fueron objeto ambos SEAT con sus históricas tripulaciones y sus mecánicos. Historia viva del automovilismo de la competición.

Era una oportunidad única y había que aprovecharla”, explicaba Isidre López, máximo responsable de SEAT Históricos. “El momento no era el más fácil, pero había que celebrar el 25 Aniversario de nuestro primer Campeonato del Mundo con el Ibiza Kit Car, y la mejor forma era participando en la exhibición de coches clásicos con las dos unidades que forman parte de la colección de SEAT Históricos, el Ibiza Kit Car E1 para Bardolet-Muntada y el Ibiza Kit Car E2 para Rius-Pallarés. Los dos han cumplido su misión y han ofrecido un gran espectáculo en los tramos del rallye. Son muchos recuerdos, mucha nostalgia para los mecánicos por haber vuelto a poner en la carretera ambos SEAT Ibiza Kit Car 25 años después y diría que ha sido algo muy bonito para la gran familia de SEAT de los rallyes y del automovilismo en España”.

Mia Bardolet: “Llevo años pasando por delante de ese coche en la Nave y siempre se me acelera el puso al verlo. Con él conseguimos grandes triunfos y esa unidad, esa exactamente, es la que yo piloté. Que esté en el museo de SEAT y que ese coche vaya a quedar para la posterioridad es algo muy bonito para mí, difícil de explicar con palabras. No me había vuelto a subir al SEAT Ibiza Kit Car desde 1996 y la verdad es que me sentí muy a gusto al volante. Corre mucho, suena de forma espectacular, es muy eficaz y divertido de pilotar. Disfruté tanto al volante en los tramos que empecé a pensar en volver a competir”.

Antonio Rius: “Han sido unos días muy bonitos, creo que inolvidables. Estar con Mia, con el copi y con todo el equipo ha sido genial. Le decía a Mia que, si hace 25 años, cuando estábamos peleando con este coche en los tramos, nos dicen que estaríamos aquí en un homenaje a lo que estábamos haciendo me habría parecido imposible, pero así ha sido. Emocionante. Volver a pilotar el SEAT Ibiza Kit Car ha sido increíble. No había vuelto a pilotarlo desde hace 25 años. Pero me senté al volante y cuando hicimos los primeros kilómetros lo sentí perfectamente y recordé cómo era y cómo era su conducción. También me di cuenta de que corría menos, se lo dije a los mecánicos y me explicaron que debía tener 40 o 50 caballos menos porque habían cambiado la electrónica para proteger el motor y poder usar una gasolina convencional. También eso me tranquilizó, porque bajo ningún concepto podía pasarle algo al coche”.

Mia Bardolet: “Hablé con Isidre López antes de salir a los tramos y me dijo que no asumiéramos riesgos para los coches, pero que diéramos espectáculo, y creo que lo hicimos. Fuimos con notas, por seguridad, y bajamos un 60 o 70 % de sus posibilidades, digamos que íbamos con margen, pero fuimos rápido en muchos casos y a veces no fue fácil, porque tras la primera pasada de los coches del Mundial la pista quedaba muy sucia, íbamos más sobre grava que sobre asfalto, pero fue muy divertido dar espectáculo sin poner en peligro los coches, que son auténticas joyas irremplazables. Ha sido un precioso retorno a la posición del “piloto oficial” de una marca tan grande como SEAT, pero ha sido como volver a empezar para todos en el equipo, también para los mecánicos, que resolvieron todas las incidencias mecánicas… yo creo que con mayor velocidad incluso que antaño. Ellos también están en plena forma”.

Antonio Rius: “Hay dos sensaciones que son imborrables tras estos días. Por una parte, el sonido del motor SEAT. Estos coches son atmosféricos y suben hasta más allá de las 8.500 rpm y eso les da un ruido precioso, espectacular y llamaba mucho la atención en los tramos. Y justo por eso, y porque íbamos dando espectáculo, la gente enloquecía a nuestro paso. Claro que íbamos mucho más lentos que los coches de carrera, pero muchos aficionados vibraban con el paso de los históricos campeones de SEAT, y en los enlaces, en las salidas y llegadas de los tramos recibimos muchísimo cariño en forma de aplausos y agradecimientos… Todo eso es para SEAT, por lo bien que lo hizo en su momento y también ahora con su colección de coches históricos”.