Max Verstappen se encuentra preparando la pretemporada de Fórmula 1 prevista para finales de febrero, machacándose físicamente para afrontar de la mejor forma posible el que será su sexto campeonato dentro del gran circo. Después de la acción del Dakar, el automovilismo se centra ahora en pruebas como las 24 horas de Daytona y el Rally de Montecerlo, y el piloto holandés no ha querido perderse la acción de esta última.

Residente en Mónaco, Verstappen ha aprovechado su flexibilidad en la agenda para visitar a los protagonistas del WRC, interesándose bastante por una disciplina que podría interesarle de cara al futuro. Gracias a su vinculación con Red Bull, Max ha podido estar junto a Sébastien Ogier y su copiloto Julien Ingrassia, además de con Elfyn Evans, Kalle Rovanpera o Sébastien Loeb.

“Estoy constantemente en las redes sociales para seguir de cerca los resultados del WRC. Creo que puedes decir que soy un fanático, sí. Obviamente, me encantaría poder probar una de estas máquinas, tal vez sucederá algún día“, argumenta el piloto de Fórmula 1.

En los últimos tiempos está de moda que pilotos de distintas categorías bajo el patrocinio de las mismas marcas realicen intercambios de sus coches para probar la experiencia, además de servir con una gran estrategia de marketing. Recientemente Lewis Hamilton y Valentino Rossi cambiaron sus monturas gracias a su patrocinador común ‘Monster’. ¿Podríamos ver a Verstappen probando un coche del WRC en el futuro? No debería extrañarnos, pero actualmente está centrado en lograr su objetivo de ser campeón del mundo.

Vía – thebestf1.es