Fernando Alonso ha terminado la séptima etapa del Dakar 2020 confirmando que tiene un buen ritmo y con el objetivo de seguir sorprendiendo en esta segunda semana de competición. A bordo del Toyota Hilux V8 4×4 de última generación, el asturiano ha demostrado que no tiene miedo de competir contra los mejores, y con el paso de las etapas se está mostrando cada vez más sólido en la consecución de etapas.
Pese a ello, no se conforma y asegura que quiere dar algo más. Un pinchazo al final de la etapa de hoy les ha hecho perder tiempo y no conseguir un mejor resultado. Por ello, se ha quedado con ganas de más y espera que en la jornada de mañana pueda empujar algo más y poder completar una gran etapa, con un buen resultado que le quite el regular sabor de boca que ha tenido hoy en la séptima etapa.
“Hemos hecho una gran etapa, pero el pinchazo al final ha supuesto que a los dos segundos se desintegrase la rueda y dañase la carrocería. Ha sido una pérdida de velocidad entre 8 y 10 kilómetros/hora que nos hizo perder tres o cuatro minutos al final. Pero echando cuentas habríamos estado cerca del top 3, que es una buena señal, y bien por entrar en meta porque a veces una delaminación puede dar a los latiguillos o cosas a parte de la carrocería y hacer perder mucho tiempo, así que no ha sido mala suerte y hemos podido acabar”, comenta Fernando Alonso.
“Un poco de rabia por lo que podría haber sido, pero satisfecho por la progresión, estar entre los mejores en 540 kilómetros me abre esperanzas para las últimas cinco etapas, a ver si mañana puedo darle un apretón más“, añade.
Vía – thebestf1.es