El avance de los vehículos eléctricos es el mayor cambio que se ha producido en la historia del automóvil. Por primera vez en más de un siglo, los vehículos se mueven sin un motor de gasolina o diésel bajo el capó y llevan en su lugar una batería, lo que modifica por completo su naturaleza.
Con la presentación del próximo Volvo XC40 SUV completamente eléctrico el mes que viene, Volvo Cars no solo presenta su primer vehículo cien por cien eléctrico: cumpliendo con la auténtica tradición Volvo, también presenta uno de los vehículos más seguros en la carretera, a pesar de los desafíos que implica la ausencia de un motor de combustión interna.
«Independientemente de que el vehículo se mueva gracias a una máquina eléctrica o a un motor de combustión, un Volvo siempre debe ser seguro», afirma Malin Ekholm, responsable de seguridad de Volvo Cars. «El XC40 totalmente eléctrico será uno de los vehículos más seguros que hayamos construido nunca».
Tomando como base las excelentes normas de seguridad del XC40 original, los ingenieros de seguridad de Volvo Cars han tenido que rediseñar y reforzar por completo la estructura frontal para hacer frente a la ausencia de motor, satisfacer los estrictos requisitos de seguridad de Volvo Cars y mantener a los ocupantes tan seguros como en cualquier otro Volvo.
«Los fundamentos de seguridad de este vehículo son los mismos que los de cualquier otro Volvo. En su interior viajan personas y el vehículo hay que diseñarlo teniendo en cuenta su seguridad», comenta Malin Ekholm.
Para mantener a los pasajeros seguros y la batería intacta en caso de colisión, Volvo Cars también ha desarrollado una nueva y exclusiva estructura de seguridad tanto para los pasajeros como para la batería del XC40. Una jaula de seguridad formada por un marco de aluminio extruido incrustado en la parte central de la estructura de la carrocería protege la batería creando una zona deformable alrededor de ella.
El hecho de que la batería esté colocada en el suelo del vehículo ofrece la ventaja adicional de hacer bajar el centro de gravedad, lo que mejora la protección contra vuelcos.
Por otra parte, la estructura de la carrocería no solo se ha reforzado en la parte delantera sino también en la trasera. El motor eléctrico se ha integrado en la estructura de la carrocería para conseguir una mejor distribución de las fuerzas de colisión fuera del habitáculo y reducir los daños a los ocupantes.
En cuanto a los sistemas de seguridad activa, el XC40 alimentado por batería incluye una tecnología innovadora. Es el primer modelo Volvo equipado con una nueva plataforma de sensores de sistemas avanzados de ayuda al conductor (ADAS, Advanced Driver Assistance Systems), con un software desarrollado por Zenuity, la empresa conjunta de Volvo Cars y Veoneer.
La nueva plataforma ADAS es un moderno sistema de seguridad activa escalable formado por un conjunto de radares, cámaras y sensores de ultrasonidos. Por su naturaleza escalable, puede seguir desarrollándose con facilidad y sienta las bases de la futura introducción de la tecnología de conducción autónoma.
Volvo Cars ofrecerá más información sobre el XC40 completamente eléctrico a lo largo de las próximas semanas, antes de presentarlo por primera vez al público el 16 de octubre.