Fernando Alonso y Jimmie Johnson están completando el esperado test que tanto anunciaron por redes sociales desde hace semanas. El asturiano ha tenido el placer de poder probar el coche del siete veces campeón de la NASCAR y dar algunas vueltas al circuito de Bahréin, mientras que el norteamericano se ha podido subir al McLaren MP4-28 de 2013 con motor V8.
Aunque se esperaba que el piloto de la NASCAR pilotara un coche V6 Turbo, finalmente ha sido el monoplaza utilizado por los de Woking en 2013 el que ha podido rodar, completando un sueño según afirmaba el propio Jimmie Johnson. Por su parte, Fernando Alonso se tenía que adecuar al coche de la NASCAR, mucho más pesado con neumáticos enormes y equipado con un motor V8 en la parte delantera. Además, con mucha menos aerodinámica que el monoplaza de Fórmula 1.
[Fuente: thebestf1.es]